MI CONFRONTACION CON LA DOCENCIA
Soy Andrea Baltazar Juárez Lic. En informática egresada del Instituto Tecnológico de Cerro Azul, en ese mismo año que egrese entre a trabajar a una empresa privada una constructora llamada ICA dónde dure cinco años aproximadamente esto sucedió durante el sexenio del presidente Carlos Salinas de Gortari, cuando se acabo el sexenio se acabo el trabajo y me quede sin empleo, me dedique a buscar y por medio de un conocido me entere que en una escuela estaban solicitando un maestro de computación al otro día de que me avisaron fui a la escuela a hablar con el director, el me hizo la propuesta ya que hasta ese momento no tenia ninguna, ala semana siguiente me dieron una respuesta positiva que podía iniciar a laborar como profesora de de taller de computación. Esto fue abril de 1996, en la Secundaria #89 P/T “Estado de Guerrero” ubicada en la delegación Xochimilco actualmente, soy la encargada del aula de medios. Un año después en febrero de 1997 entre a formar parte de los docentes del Colegio de Bachilleres en el área de CECAT, impartiendo las asignaturas referentes a la capacitación en informática. Posteriormente surgieron dos asignaturas en tercer y cuarto semestre (Laboratorio de informática) de las cuales imparto Laboratorio de informática I a tercer semestre y actualmente también imparto TIC I a primer semestre con un total de 26 horas frente a grupo.
Hoy pienso que fue lo mejor que me pudo suceder, ya que me encanta ser docente poder trabajar con los jóvenes, disfruto mucho mi trabajo he aprendido muchas cosas, como la forma de actuar ya debemos ser una personas abiertas, serenas y tolerantes, debemos de asumir ante nuestros alumnos el papel de mediador y consejero, tenemos que tener capacidad para el trabajo en equipo, debemos ser capaces de orientar personalmente y profesionalmente a los alumnos, que tengan un alto grado de adaptabilidad a las situaciones conflictivas y cambiantes del aula y del contexto social; y, sobre todo, debemos poseer tres cualidades: la ejemplaridad, la autoridad moral y la madurez afectiva.
Participar en la educación media superior me ha dado la oportunidad de trabajar en dos ambientes diferente la educación básica y educación media superior los dos están ligados ya que el nivel básico es un eslabón que tienen que pasar los jóvenes para llegar al medio superior. Desempeñarme en bachilleres como docente, es una grata experiencia enriquecedora como ser humano. Como docente y profesional. He aprendido en cuanto a las competencias, cuáles deben ser desarrolladas, cuales deben ir incorporadas en el alumno que egresa para ingresar y cursar una carrera universitaria, o integrarse a la actividad productiva.
Como ya lo dije anteriormente me encanta mi trabajo, lo disfruto, se que no me equivoque al integrarme a la docencia. Ya que el significado de ser docente lo vivo cada día como una experiencia hermosa que no cambio. Estoy convencida de que el papel del docente de hoy es ser creativo y constructivista con una visión positiva de la relevancia de su trabajo para la sociedad. Ya que en esta época se necesitan docentes convencidos de que un buen sistema educativo hoy no es el que sólo enseña muchos conocimientos, sino de que el éxito educativo de todo el alumnado depende de la capacidad que desarrolle para expandir ese conocimiento, para aplicar ese saber a otros ámbitos, para compartirlo e intercambiarlo.
Pero no todo es color de rosa, en esta tarea que tenemos los docentes, también hay momentos que nos dejan algún mal sabor de boca que debemos afrontar con el doble de entusiasmo. Los grupos con los que trabajo son heterogéneos, como ya lo dije antes me gusta trabajar con jóvenes de carácter diversos y formas de interpretar su realidad de manera distinta y caminar con ellos durante su proceso de formación en este nivel medio superior acompañándolos y facilitando la incorporación de conocimientos. Pero lo que me causa un poco de insatisfacción o incomodidad, es el trabajar con grupos tan saturados de alumnos. Sobre todo los grupos de primer semestre ya que atiendo varios grupos que tienen 52 y 56 alumnos. Si los grupos fueran más pequeños la atención podría ser más personalizada y podríamos mejorar los resultados en los estudiantes.
Otro punto importante que no debo dejar de mencionar es que con la nueva reforma hacen falta salones de clases, falta de equipos en las aulas y laboratorios de informática, todas las aulas de clases carecen de las tecnologías actuales, como son PC, proyectores de cañón, pantallas, televisores, video caseteras, los cuales son apoyos muy efectivos como herramientas didácticas y los laboratorios de informática no son suficientes para el alumnado con que cuenta la escuela.